Economías emergentes en jaque

Publicado en el diario «El Nacional» de Caracas. Jueves 10 de septiembre de 2015

 

Una serie de circunstancias, muchas de ellas de origen externo, están afectando muy negativamente el desempeño de múltiples economías emergentes, las  latinoame­ricanas entre ellas. En efecto, la desaceleración de la economía china, las expectativas de aumento de las tasas de interés en los Estados Unidos y en otras economías indus­trializadas, y el desplome de los precios de múltiples commodities, el petróleo en parti­cular, han deteriorado las cuentas externas de estos países, han debilitado sus monedas, han generado desequilibrios fiscales y han desacelerado su crecimiento económico, condenando a algunos de ellos a sufrir recesión y repuntes importantes de desempleo.

La declinación de las exportaciones chinas, el debilitamiento de su sector indus­trial, y la moderación de la actividad de la construcción generaron una desaceleración de esa economía que ha estado inquietando a los inversionistas y a los proveedores de las materias primas que ese país tradicionalmente requiere, ya que aquel menor crecimiento se traduce en una moderación de sus importaciones.  La situación se exacerbó por la reciente e inesperada devaluación del yuan, la cual fue interpretada por muchos como el inicio de una guerra cambiaria de sucesivas devaluaciones para apuntalar las exporta­ciones chinas, generándose una salida masiva de capitales y el consecuente desplome de su mercado bursátil.  A su vez, el menor crecimiento de esa economía ha contribuido a generar una reducción generalizada de los precios de las materias primas, situación que ha deteriorado las cuentas corrientes de múltiples países emergentes exportadores de esos commodities. Eso, además de desequilibrar las cuentas fiscales de estos países debido al menor cobro de impuestos, ha incrementado la necesidad de captar capitales financieros foráneos  que compensen el deterioro de sus transacciones corrientes exter­nas, objetivo que no ha sido fácil de lograr debido a la expectativa cada vez más arrai­gada de aumentos inminentes de las tasas de interés en los Estados Unidos, en atención a la finalización de la política monetaria ampliamente expansiva que implementó la Reserva Federal en años recientes con el fin de estimular la actividad económica. Esto se ha traducido en salidas netas de capitales financieros de varias economías emergen­tes, como Brasil y México,  hacia la economía norteamericana, haciendo que sus reser­vas internacionales bajen y que sus monedas se deprecien de forma acentuada. Como respuesta a esta situación, se han implantado políticas fiscales y monetarias restrictivas en estos países con el consecuente aumento de sus tasas de interés, para así tratar de neutralizar los efectos inflacionarios causados por el encarecimiento de sus importacio­nes debido a la devaluación de sus monedas. Todo lo anterior se ha traducido en restric­ción de actividad económica, habiendo casos como el de Brasil, que han caído en rece­sión.

Las economías regionales exportadoras de petróleo, como México, Colombia, Ecuador y Venezuela han sufrido el desplome de sus precios de exportación desde la segunda mitad del año 2014 a esta parte, debido a una persistente situación de sobre­oferta de hidrocarburos creada por la negativa de Arabia Saudita y otros países produc­tores del Medio Oriente a reducir su producción, con el fin de mantener los precios en niveles muy bajos, para así reducir la rentabilidad y competitividad del costoso negocio de extracción de petróleos de esquistos en los Estados Unidos. Esto ha reducido abrup­tamente los ingresos de los países exportadores de petróleo, desbalanceando sus cuen­tas fiscales y depreciando sus monedas. Todo ello se ha traducido en restricciones de actividad económica, depreciaciones acentuadas de sus monedas y en algunos casos mayores presiones inflacionarias, siendo Venezuela el caso extremo, donde se prevé para este año una inflación cercana al 200% y una contracción del PIB próxima al 9%.

Nota: Fotografía tomada del portal DaVinci